El sábado 13 de mayo de 2017 se celebró, en Tarragona, el Encuentro diaconal familiar interdiocesano que los diáconos de las diócesis catalanas realizan cada primavera, rotativamente, en una de las diez diócesis catalanas, acogidos por el arzobispo o el obispo de la misma, desde hace más de treinta años. La convocatoria y organización del Encuentro es a cargo de la «Asociación San Lorenzo para la promoción del diaconado».
A las once de la mañana se reunieron los asistentes, diáconos y esposas de las archidiócesis de Tarragona i Barcelona, y de las diócesis de ​​Lleida, Sant Feliu de Llobregat y Tortosa, en el Centro Tarraconense El Seminario.
La acogida del grupo fue a cargo del diácono de Tarragona, Javier Álvarez. Se dio paso a un coloquio entre los asistentes, que se presentaron y explicaron sus tareas ministeriales y valoraron la consolidación del ministerio diaconal en las diócesis catalanas. Actualmente en Barcelona hay 43 diáconos permanentes, en Girona, 11, en Lleida, 6, en Sant Feliu de Llobregat, 18, en Solsona, 5, en Tarragona, 7, en Terrassa, 14, en Tortosa, 5, en Urgell, 3 y en Vic, 10. Son un total de 122 y los candidatos, unos treinta. En el conjunto de las diócesis españolas hay poco más de 400.
En relación a las actividades del próximo curso se prevé que el encuentro familiar interdiocesano de otoño se celebre en Barcelona, ​​en el monasterio benedictino de San Pedro de las Puelas, el sábado 28 de octubre. El XXXII Encuentro de diáconos de las diócesis españolas tendrá lugar en Burgos, del 6 al 9 del próximo mes de diciembre. Y el encuentro familiar interdiocesano de primavera muy probablemente se celebrará en la diócesis de Girona.
En el ámbito internacional, el número total de diáconos permanentes se acerca a los 50.000 y será relevante la celebración de la Conferencia de Estudios, organizada cada cuatro años por el Centro Internacional del Diaconado, que tendrá lugar en Francia, en Lourdes, entre el 7 y el 10 del próximo mes de septiembre.
Los asistentes al encuentro felicitaron al diácono de Barcelona, ​​Aureli Ortín, por la concesión de la Cruz Pro Ecclesia et Pontifice, por parte del papa Francisco, a petición de los obispos catalanes, por sus veintitrés tres años de servicio como vicesecretario de la Conferencia Episcopal Tarraconense. La felicitación se hizo extensiva a su esposa Montserrat Martínez por su apoyo durante los treinta cinco años de ministerio diaconal de Mn. Aureli.
A la una de la tarde, en la capilla del Seminario, el arzobispo de Tarragona, Mons. Jaume Pujol, presidió la Eucaristía. Al finalizar, se hizo la foto de grupo frente a la capilla de San Pablo, lugar donde la tradición conmemora la probable visita de San Pablo a Hispania (Rm 15,28), para evangelizar el extremo más occidental del Imperio Romano.
La comida de hermandad fue a las dos, en un restaurante cercano, acompañados por Mons. Jaume Pujol y por Mn. Joaquim Fortuny, vicario general del Arzobispado de Tarragona.
Por la tarde se hizo una visita cultural al conjunto arquitectónico de la Catedral de Tarragona, dirigida por el canónigo Joaquín Gras. Al terminar, en la capilla de los santos mártires Fructuoso, obispo, y sus diáconos Augurio y Eulogio, con el rezo de las Vísperas finalizó la jornada.
Damos gracias a Dios por la fraternidad compartida.