El Secretariado Interdiocesano de Juventud, organismo formado por los delegados y delegadas de juventud de Cataluña y Mallorca, se reunió el lunes 26 de noviembre en Barcelona, ​​presididos por Mons. Sergi Gordo, obispo auxiliar de Barcelona.

El cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona, ​​aceptó la invitación de los delegados y delegadas para presentar unas líneas de reflexión a propósito del Sínodo de obispos sobre juventud, del que él ha sido uno de los padres sinodales.

La reflexión y el diálogo posterior fueron muy positivos, aclarando que no podemos separar Iglesia y jóvenes, es una misma realidad: Los jóvenes son Iglesia.

De la conversación salieron algunas ideas claras: la escucha y el dejarse interpelar por los demás como clave de conversión, eliminar los prejuicios y las miradas negativas, y hablar en libertad y amor. El cardenal Omella se hizo eco del concepto sinodalidad, que invita a la Iglesia a caminar junta, a hacer camino con todos y todas, así como situarnos más en una Iglesia en salida, misionera y menos autorreferencial. Por tanto, el sínodo nos quiere acercar a los discípulos de Emaús, y nos invita a acoger, escuchar, iluminar y hacer camino conjuntamente.

Posteriormente, la reunión del SIJ continuó con los siguientes puntos del orden del día: la preparación de la jornada de formación para acompañantes de adolescentes y jóvenes, el encuentro europeo en Taizé, la JMJ en Panamá y otros temas.